Uno de los grandes placeres del bibliófilo viajero es conocer las librerías de los lugares que visita. Y aunque cueste creerlo, en estos tiempos de crisis, de internet, de redes sociales, del todo digital, aún existen maravillosas librerías de ocasión, popularmente conocidas como librerías de viejo.
Muchas disponen a día de hoy de catálogo en la red, pero no hay nada como visitar el espacio físico. Decía Andrés Trapiello, en el Pregón que pronunció en 2010 en Sevilla, que los que buscamos libros viejos, si no somos ricos (…) tenemos que buscar en las librerías de viejo, además de libros, otras cosas, si no, no se explica este afán sostenido a lo largo de los años.
Y debe ser verdad, porque no tiene otra razón de ser que una afición así se mantenga si no es por la existencia de ciertos mecanismos mentales difíciles de explicar, esos que nos llevan de librería en librería, o en el caso de las Ferias del Libro, de caseta en caseta, a la caza del ejemplar deseado.
La Casa de los Poetas y las Letras se une a la programación de la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de Sevilla en 2018 con el ciclo titulado De libros antiguos y ciudades de ocasión (y viceversa), que aspira a “promover la cercanía y el disfrute de las principales vertientes de la bibliofilia, unida en esta ocasión al viaje y las ciudades, bien desde la aventura de la educación sentimental o desde el descubrimiento literario o documental”.